jueves, 27 de enero de 2011

The Whitest Boy Alive

The Whitest Boy Alive,  poseedores de un carisma y fuerza en el escenario que lograron  que en los primeros 15 minutos sudáramos y bailáramos sin tener deseos de parar. Tercera vez en México de la banda  y mi primera vez en verlos.
Regresaron pese a los inconvenientes del año pasado, si, un “súper fan”  le quitó los lentes al vocalista y ¡adiós concierto!
























Sus canciones no duran en promedio más de 5 minutos, sin embargo ese día,  cada una de ellas, fueron en verdad duraderas además de ser garantía de bailar y disfrutar. Tocaron el primer disco casi  en su totalidad, comenzaron con Golden Cage  y poco a poco las favoritas de muchos, Fireworks, Don´t give up, la conocida hasta el cansancio Burning,  Courage de las más coreadas.


















Al final todos quedamos satisfechos, la banda y nosotros, aun más.

domingo, 23 de enero de 2011

Efecto Dominó


Normalmente, cuando algo malo nos sucede, no perdemos oportunidad de culpar al karma, nos es difícil  aceptar que ese hecho desafortunado, haya sido consecuencia de nuestros actos.

Día a día llevamos a cabo miles de actos monótonos, desde que nos levantamos hacemos lo mismo que el día anterior: el desayuno, el bañarnos, la ruta para llegar a nuestro destino, es la misma todos los días, vaya, hasta cuando se nos hace tarde, tomamos el taxi en el mismo lugar.

Sin embargo hay algunos actos que son determinantes en un futuro,  pequeñas palabras que decimos, silencios que guardamos, miradas que lanzamos. Claro esta, que cuando lo hacemos no comprendemos la importancia ni el efecto que tendrán.
 
Pero si analizáramos nuestra vida en perspectiva, notaríamos que cada uno de esos pequeños actos son piezas importantes en un conocido efecto domino.

Visualmente es más sencillo mostrarlo, he aquí algunos ejemplo de lo que menciono:







No pretendo que ahora analicemos meticulosamente nuestros actos, sino mas bien que comprendamos las consecuencias que estos pueden tener.

viernes, 14 de enero de 2011

Nos llamamos VS Joe Volume

El ver a  bandas de rock siempre emociona mucho, en mi caso, más aun si a esto le sumamos que son mexicanas y el lugar donde se presentarán, está cerca de mi casa.


El miércoles me percate del contraste entre dos bandas mexicanas, por un lado, Nos llamamos (Pantitlán. Un disco de sonido rock psicodélico de hace 2 años), cuatro chicos que no tienen más pretensiones que tocar, lo cual,  hacen muy bien. Los he visto un par de veces y en todas ellas, se nota una sencillez  y carisma que agrada, no se preocupan por como visten o que dirán, ellos tocan,  y punto. Ese punto sin embargo no es suficiente, en mi opinión les hace falta más interacción con el público, y claro, entre ellos.












Por el otro Joe Volume (la Roma. Tres discos. Amante de The Clash y The Ramones.), muy buena ejecución, un tanto más  de espectáculo, quienes también cuentan con una legión de seguidores más amplia (novia incluida), sin embargo, la actitud que muestran, al menos a mí, no me parece honesta.






Desconozco el porcentaje ideal de actitud y talento necesarios para lograr éxito la música, es notorio que ambas bandas lo tienen, y además, el éxito, es subjetivo.